Opiniones Becas Eurolingua 2024
Seguimos esforzándonos año tras año (y cada año con más fuerza e ilusión) para sacar adelante las Becas Eurolingua y poder dar así la oportunidad a 20 estudiantes de vivir una experiencia muy enriquecedora y especial que les ayuda no sólo a mejorar su nivel de inglés sino a crecer a nivel personal.
Pincha en los enlaces para poder consultar los programas que han realizado los adjudicatarios:
Me da mucha pena empezar a escribir esto, ya que significa que las dos mejores semanas de mi vida han llegado a su fin. Es literalmente imposible plasmar por escrito lo feliz que me he sentido en Derry. Si bien llegué con altas expectativas, jamás imaginé vivir algo así de mágico. El tiempo pasó tan rápido que parece que todo hubiera durado apenas unas horas.
Desde el primer momento, congenié perfectamente con todo el mundo y formamos un grupo inseparable. Nunca antes me había sentido tan arropada, querida y feliz en tan poco tiempo. Además, Derry es el destino ideal; una ciudad preciosísima que tiene todo lo que necesitas. Es muy cómoda y cuenta con una gran variedad de lugares, desde parques naturales hasta centros comerciales y mucho más para pasarlo en grande.
En cuanto a las clases de inglés, no se sienten como clases tradicionales por lo amenas, dinámicas, y entretenidas que son. Los profesores son majísimos, aprendes mucho vocabulario y te ayudan a ganar mucha confianza a la hora de hablar en inglés. Asimismo,
las actividades, noches de fiesta y excursiones que organiza Eurolingua son creativas, enriquecedoras, divertidas y llenas de momentos inolvidables.
El ambiente en nuestra casa fue muy acogedor, nuestra host mummy es un amor de persona y mi host sister me quería muchísimo, haciéndome sentir como si de verdad fuéramos hermanas.
Sin lugar a dudas, esta experiencia ha sido inmejorable, única, inigualable, extraordinaria, magnífica… Hemos pasado todo el rato riendo, y disfrutando al máximo, hasta el punto que llamé a mis padres llorando porque no quería volver a España. También me gustaría hacer hincapié en que me ha hecho ganar muchísima confianza en mí misma y me ha convertido en una mejor persona.
En definitiva, me siento inmensamente feliz de que un pedazo de mi corazón esté a partir de ahora lleno de los recuerdos de estas maravillosas dos semanas. Os quiero muchísimo a todas y todos, siempre estaréis presentes en mí. Derry girls forever ❤️
Un millón de gracias Eurolingua por haber cumplido mi sueño, esto no hubiese sido posible sin vosotros 💗
Durante dos semanas he tenido la suerte de disfrutar de una experiencia única, como la que ha sido la Beca Eurolingua en Dublín.
Desde el primer momento la coordinación para gestionar el alojamiento me hizo sentir segura y en buenas manos, ya que la llegada al apartamento no pudo ser más cómoda y sencilla. El apartamento era espacioso y contaba con todas las comodidades que hicieron que me sintiera como en casa, junto con los compañeros que hicieron la convivencia muy llevadera y con los que hice mucha vida de piso.
En cuanto a las clases no puedo estar más satisfecha, ya que la academia elegida me ha dado herramientas y recursos para mejorar mi nivel de inglés. La profesora llevó una dinámica de clases muy amena y completa que me permitió trabajar en mis habilidades escritas y orales de manera transversal.
En general el ambiente creado durante estas dos semanas y la buena gestión de Eurolingua me hacen sentir muy afortunada de haber podido disfrutar de esta experiencia que ha sido un auténtico privilegio.
Derry. Cuando escucho esta palabra me viene a la mente: lugares fantásticos, diversión aprendizaje, historia…
Becas Eurolingua. Cuando escucho esta dos palabras pienso: oportunidad, aventura, agradecimiento…
En cuanto mezclamos estas tres solo puedo pensar en: UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE.
Mis días en Derry han sido, sin duda, una travesía emocionante. Nada más llegar me sentí muy arropada tanto por mis compañeros y monitoras, como por mi host family.
Las clases de inglés fueron únicas. Gracias a los profesores nativos, su compromiso y a sus actividades dinámicas, conseguí mejorar mi inglés en un amplio rango de habilidades lingüísticas: la auditiva, la escrita y sobre todo la oral. Además, el simple hecho de tener que relacionarme con las personas de mi alrededor, como los buseros, camareros, dependientes de las tiendas o mi host family, contribuyeron a una inmersión total en el idioma ayudando a mejorar aún más mi inglés.
Por otro lado, explorar Derry y sus alrededores fue una auténtica aventura. Gracias a las actividades programadas pudimos conocer la historia de sus murallas, de sus murales, de sus monumentos y de sus calles, además de aprender bailes típicos de la región. También, en el tiempo libre, pudimos realizar otro tipo de actividades como ir a la bolera, ir al cine, saltar en camas elásticas, ir a la piscina o a escalar.
Al mirar atrás, me doy cuenta de que de mi paso por Derry me llevo una infinidad de cosas buenas: personas maravillosas, aventuras que recordar, anécdotas divertidas y sobre todo mucho aprendizaje. Volvería a repetir esta experiencia sin pensármelo dos veces. Ahora, solo me queda agradecer a Eurolingua y a todas las personas que hicieron que todo fuera posible.
¡Gracias de corazón por esta EXPERIENCIA INOLVIDABLE!
Derry girls ❤️
Es una experiencia que ha dejado una huella en mi vida y recordaré con mucho cariño en el futuro.
Desde el momento en que aterricé en Dublín, supe que estaba a punto de embarcarme en una aventura única. La diversidad cultural fue una de las primeras cosas que me sorprendió. En las clases y en el piso donde me hospedé, conocí a personas de muchos países y de distintas edades, lo que enriqueció aún más mi experiencia. Cada día era una oportunidad para aprender algo nuevo, no solo sobre el inglés, sino también sobre las costumbres y tradiciones de mis compañeros.
Durante estas dos semanas, aproveché al máximo mi tiempo libre para explorar ciudad de Dublín. Visité prácticamente todos los museos, desde el Museo Nacional de Irlanda hasta el Museo de Historia Natural, cada uno ofreciéndome una perspectiva única sobre la rica historia y cultura del país. Los paseos por la ciudad eran encantadores, ya que podía caminar a todos lados y descubrir rincones llenos de historia y encanto.
El clima irlandés fue bastante variado. Hubo días fríos y nublados, otros lluviosos, y algunos sorprendentemente soleados. Sin embargo, cada tipo de clima tenía su propio encanto y contribuyó a la autenticidad de mi experiencia. Además, tuve la oportunidad de viajar a algunos pueblos cercanos a Dublín, donde pude disfrutar de la belleza del paisaje rural irlandés y su hospitalidad.
Una de las cosas que más disfruté fue conocer la vida irlandesa en los bares. Estos lugares no solo eran perfectos para relajarse y disfrutar de la música tradicional irlandesa, sino que también eran el escenario ideal para conocer a locales y practicar mi inglés en un ambiente más informal y divertido.
En resumen, estas dos semanas en Irlanda han sido una experiencia inolvidable. No solo mejoré mi inglés, sino que también me llevé un sinfín de recuerdos y amistades que perdurarán en el tiempo. Agradezco enormemente a Eurolingua por brindarme esta oportunidad única, que ha hecho que mi vida de estudiante sea aún más emocionante y enriquecedora.
¡Espero poder regresar algún día a esta maravillosa isla verde!
Aprender inglés en el extranjero es una experiencia que va mucho más allá de aprender un idioma, ya que permite sumergirse en un nuevo país, conocer gente nueva y descubrir nuevos lugares.
Me sentí feliz y nerviosa desde el momento en que comencé a hacer las maletas. Esta era mi primera vez en Irlanda y no sabía muy bien qué esperar. La ciudad me recibió con su aire fresco y la amabilidad de su gente. Después de instalar mis cosas en la casa donde iba a vivir durante 15 días, decidí salir a caminar y conocer Dublín. Me enamoré de la ciudad en las primeras horas, con sus pintorescas casas de ladrillo, bares tradicionales y música en vivo en cada rincón. Aunque es una ciudad pequeña comparada con otras ciudades europeas, la energía especial de Dublín y su mezcla de modernidad y tradición me atrajeron desde el primer día.
En cuanto a las clases de inglés, comenzaron el segundo día de mi llegada. El ambiente de la escuela es muy internacional porque había alumnos de todo el mundo. Esto no sólo me ayudó a mejorar mi inglés, sino que también me permitió aprender una nueva cultura y hacer amigos con los que sé que continuaré en contacto. Mis profesores fueron muy amables y paciente, siempre dispuestos a ayudar y ajustar las lecciones a las necesidades de sus alumnos.
Una de mis cosas favoritas de este curso fue la variedad de actividades. No se trata sólo de aprender en el aula; hay excursiones, talleres y salidas a pubs que organiza la propia escuela. Estas actividades no sólo hacen que el aprendizaje sea divertido, sino que también permitan practicar el idioma de manera real y a pie de calle. Visité la icónica biblioteca del Trinity College, conocí pueblos costeros cercanos como Howth en los que disfrutamos de la hermosa vista del mar y la naturaleza irlandesa. Un fin de semana pudimos visitar Galway y los acantilados de Moher, con los cuales quedé muy impresionada. Dublín también tiene buena música, ya que hay música en vivo casi todas las noches en los bares de Temple Bar y Grafton Street.
En resumen, las dos semanas que pasé en Dublín fueron para mucho más que sólo aprender inglés. Esta fue una experiencia en la que me desarrollé personal y académicamente. Noté una mejora en mi inglés, especialmente en términos de fluidez y confianza en mí misma. Pero más allá de esto, también me llevo recuerdos inolvidables y conexiones con personas de todo el mundo. Su gente es cálida y acogedora, su cultura es rica y diversa, y su entorno es ideal para quienes desean aprender inglés. Dos semanas fueron tiempo suficiente para enamorarme de esta ciudad. Definitivamente regresaré algún día, ya sea para continuar mis estudios o simplemente para regresar a esta fascinante ciudad irlandesa.
Parece que fuera ayer cuando llegué a Irlanda. Me acogieron en un apartamento y, desde el primer momento, me sentí parte de una familia. Pero mi amor por Irlanda no se limitó a la ciudad; también me enamoré de su gente. Ojalá todo el mundo fuera así. Es una pena que el tiempo no siempre acompañe, pero al mal tiempo, buena cara, ¿no?
El lunes fue mi primer día de clases. Al principio me sentía un poco perdido, pero mis compañeros me ayudaron en todo lo que necesité. Para comer, solía ir al Trinity, cerca de la academia. Aunque os cansaréis de caminar, vuestras piernas se acostumbrarán. Veréis cómo pasan los días y, cuando llegue el momento de iros, no querréis marcharos y no podréis creer que ya es hora. Esta ha sido una experiencia inolvidable e incalculable.
Han sido dos semanas inolvidables. He aprendido tanto de la cultura irlandesa como inglés en las clases. He conocido gente increíble, con la que no he parado de reír y disfrutar, y que espero conservar en un futuro.
Parece mucho tiempo, pero ciertamente los días pasan volando una vez estás allí. Por eso, nosotros aprovechábamos las mañanas para aprender y mejorar nuestro inglés. Las clases eran muy amenas y hacíamos juegos para poner en práctica la teoría que aprendíamos. Después, por las tardes, explorábamos Dublín, o visitábamos pueblos cercanos costeros. A su vez, utilizábamos los findes de semana para visitar ciudades como Belfast. No paramos de caminar y caminar en todo el viaje exprimiendo todo el tiempo que teníamos en la ciudad.
Doy las gracias a Eurolingua por haberme dado la oportunidad de hacer este viaje y gracias también a las personas que han formado parte de él, y que han hecho de mi experiencia una muy feliz e inimaginable. Ojalá más gente pudiera disfrutar de este tipo de becas que aportan tantas facetas positivas a tu vida.
Quiero expresar mi más profundo agradecimiento por la oportunidad dada, estas dos semanas en Dublín me han cambiado la vida. He aprendido y mejorado mis habilidades en la lengua inglesa en gran medida pero, sobre todo, he aprendido a convivir con un gran
grupo de personas, a las que me llevaré en el corazón por siempre. La oportunidad de vernos día a día, en clase, en la residencia y haciendo planes juntos, nos unirá para siempre.
El profundo aprecio a la multiculturalidad también es un punto importante de mi viaje, ya que la historia de Irlanda y de todas las ciudades que visité me conmovió y me hizo empatizar con sus habitantes, los cuales siempre nos recibieron con los brazos abiertos. Por suerte hay muchísimas opciones de ocio, tanto por parte de la escuela, con la que fui al espacio natural de Glendalough, como por libre a los pueblos costeros cercanos y otras ciudades.
Entiendo la gran responsabilidad que conlleva haber sido beneficiario de esta beca, y por eso aproveché al máximo cada momento que este programa me ofreció. Estoy seguro de que esta experiencia fue fundamental para mi desarrollo personal y profesional, y me permitió regresar con una visión más amplia y enriquecida. La labor social que haceis es un gran ejemplo de solidaridad, ya que si no fuera por la beca, no hubiera vivido esta experiencia, así que animo a todo el mundo a que se esfuerce y le de rienda suelta a su imaginación para que pueda solicitar estas becas. Una vez llegado a España, la experiencia no acaba, si algún día quiero desarrollar mi carrera en esta maravillosa isla, tendré muchas más herramientas y conocimientos para disfrutar de mi vida allí.
Después de dos semanas en Derry gracias a la beca de Eurolingua, puedo decir que esta experiencia ha sido transformadora en muchos aspectos. Desde el momento en que llegué, me sentí acogido por la host family y los monitores y profesores del colegio, lo que ayudó a que me sintiese mucho más tranquilo.
El principal objetivo de este viaje era mejorar mi inglés, y en ese sentido, las clases superaron mis expectativas, ya que eran muy dinámicas e incitaban a participar y hablar. Gracias a esto, aprendí a comunicarme de manera más fluida y gané confianza para expresarme en inglés en las situaciones fuera del colegio.
Además del aprendizaje académico, estas dos semanas estuvieron llenas de actividades y excursiones alucinantes, como la salida a Giant’s Causeway. Pero sin duda alguna, lo mejor que me llevo de la experiencia son los amigos que he hecho por el camino y estoy seguro de que estas amistades perdurarán más allá de este viaje.
En resumen, estas dos semanas en Derry no solo me han permitido mejorar mi inglés considerablemente, sino que también me han ofrecido una gran oportunidad para crecer como persona, explorar un país y cultura fascinante y hacer nuevos amigos.
Esta experiencia ha superado todas mis expectativas y estoy eternamente agradecido a Eurolingua por hacerla posible. Por esto, la recomiendo totalmente si quieres vivir nuevas aventuras.
Gracias a las becas de Eurolingua, tuve la oportunidad de disfrutar de dos semanas inolvidables en Dublín. Este programa no solo me permitió mejorar mi nivel de inglés, sino que también me sumergió en una experiencia cultural enriquecedora.
Por las mañanas, asistíamos a clases de inglés que eran interactivas y muy dinámicas. Mi profesora fue excepcional; no solo aprendimos nuevo vocabulario, sino que también adquirimos una mayor fluidez en el idioma a través de actividades prácticas. Las clases eran entretenidas y estaban diseñadas para mantenernos motivados.
Por las tardes, teníamos una variedad de actividades perfectamente organizadas que nos permitían explorar la ciudad y sus alrededores. Un día en particular que destacaré fue nuestra visita a un pueblo costero cerca de Dublín, donde tuvimos la suerte de presenciar un espectáculo aéreo militar. ¡Fue una experiencia fascinante! Durante todos los días se planificaban actividades, lo que nos permitió aprovechar al máximo nuestra estancia.
Además, había actividades sociales diseñadas para conocer a otros estudiantes internacionales. Gracias a esto, hice amigos con mucha facilidad. En la casa donde me hospedaba, convivía con compañeras maravillosas, con quienes formamos un grupo de amigos y organizamos nuestras propias actividades. Uno de los momentos más destacados fue nuestro viaje a Belfast, que resultó ser una aventura inolvidable.
Dublín es una ciudad vibrante, con una vida nocturna muy activa. Tuvimos la oportunidad de disfrutar del ambiente festivo de la ciudad, lo que añadió un toque extra a nuestra experiencia.
Finalmente, quiero agradecer a Eurolingua por su excelente atención y compromiso. Siempre estuvieron disponibles para resolver cualquier duda y, en mi caso, me brindaron un gran apoyo cuando me puse mala durante el viaje. Su profesionalidad y dedicación hicieron que me sintiera segura y respaldada en todo momento. Sin duda, recomendaría a cualquiera que busque mejorar su inglés mientras vive una aventura inolvidable participar en las becas de Eurolingua. Gracias por todo.
Quería empezar este artículo agradeciendo a Eurolingua por esta gran oportunidad de realizar una inmersión lingüística en el extranjero, en mi caso, en Dublín.
Durante estas dos semanas no podría destacar una sola cosa en particular, ya que todo ha sido una experiencia enriquecedora. Primero, he podido disfrutar de la ciudad y sus alrededores, llenos de verdes paisajes y acantilados impresionantes. Durante la estancia, también he tenido la oportunidad de perfeccionar mi inglés, salir de mi zona de confort y enfrentarme a una vida diaria en inglés. He conocido a personas maravillosas de distintos lugares del mundo, con culturas diversas, de quienes he aprendido mucho sobre sus respectivos países.
A nivel personal, esta experiencia ha sido un gran reto de cara a mi futuro académico y ha resultado de gran ayuda para el desarrollo de mis habilidades lingüísticas en inglés. La inmersión me ha proporcionado una valiosa perspectiva sobre la importancia de dominar un segundo idioma en un entorno real y me ha permitido desenvolverme con mayor seguridad y fluidez en conversaciones cotidianas y académicas.
Estas dos semanas han sido muy intensas. Por las mañanas, teníamos clases donde perfeccionábamos el inglés en todas sus facetas: speaking, writing, reading y listening. Las clases eran muy diferentes en comparación con España; eran muy interactivas y dinámicas. Compartíamos conversaciones con el resto de compañeros y compañeras de clase de otros países, discutiendo temas propuestos por el profesor para practicar. La metodología utilizada fomentaba la participación activa y el intercambio de ideas, lo cual enriquecía aún
más el aprendizaje. Además, los profesores eran altamente calificados y utilizaban recursos modernos y variados para mantenernos motivados y comprometidos con el proceso de aprendizaje. Todas las tardes las dedicábamos a visitar Dublín y sus alrededores. Visitamos lugares fascinantes como el Temple Bar, el centro de Dublín, el Jardín Botánico, y museos impresionantes. Cada visita nos brindaba la oportunidad de sumergirnos en la cultura irlandesa y aprender sobre su historia y tradiciones. Las excursiones a los acantilados y los paseos por los parques naturales nos permitieron disfrutar de la belleza natural de Irlanda, mientras que las visitas a los museos y sitios históricos nos ofrecieron una visión más profunda de su rica herencia cultural.
Esta inmersión en Dublín ha sido, sin duda, una de las mejores decisiones que he tomado, y estoy seguro de que los beneficios de esta experiencia me acompañarán durante mucho tiempo.
En conclusión, la inmersión lingüística en Dublín ha sido una experiencia transformadora y muy gratificante. Agradezco nuevamente a Eurolingua por hacer posible esta aventura educativa y cultural. Animo a todos aquellos que estén considerando una experiencia similar a dar el paso y aprovechar al máximo cada momento, ya que las oportunidades de crecimiento personal y académico son innumerables.
Gracias por permitirme disfrutar de estas dos semanas en Derry, recordaré siempre esta experiencia. Me llevo muy buenos amigos, conocí una nueva cultura, mejoré mi nivel de inglés y todo ello ayudó a que me lo pasara en grande.
Las clases diarias fueron muy entretenidas y dinámicas, mucho mejor de lo que me esperaba. Aprendíamos inglés mientras nos divertíamos y la posibilidad de poder ponerlo en práctica con la gente del lugar ayudó a que ganara en confianza y me soltara a la hora de hablar.
Sin duda, repetiría el viaje y lo recomendaría :).
No me creo que ya esté de vuelta en mi casa. Aún parecía ayer cuando llegué a Irlanda del Norte y conocí a mi encantadora host family y compañera con la que compartía la estancia. No me parece que hayan pasado ya dos semanas viviendo en Derry como si fuera una habitante más. Y es que se dice que cuando te lo pasas en grande, el tiempo pasa volando…
He de confesar que la noche antes de tomar el vuelo estaba algo nerviosa. Ahora me doy cuenta que sin motivo alguno, pues durante mi estancia me sentí como en casa.
Después de vivir esta experiencia, he notado tal mejoría en mi inglés que me siento muy cómoda hablándolo con cualquier persona. He aprendido mucho vocabulario, frases típicas, cultura irlandesa… Y de una forma muy entretenida, ya que en las clases no existía el aburrimiento.
De este viaje me llevo muchos recuerdos inolvidables con mis amigos y unas ganas inmensas de volver a la ‘Isla Esmeralda’.
Por último solo me queda agradecer a Eurolingua el haberme concedido esta oportunidad, la cual todo el mundo debería vivir al menos una vez en su vida.
La experiencia de hacer un curso de verano en Derry deja una huella imborrable. Quizás sea por la ilusión de conocer otra cultura que, aunque puede parecer similar en un principio, resulta tan diferente a la nuestra. Cada día está lleno de nuevas emociones, desde las excursiones a lugares emblemáticos, como los castillos y el precioso lago de Donegal y los paisajes mágicos de la Calzada del Gigante, hasta las actividades que te permiten sumergirte en la historia de la ciudad de Derry.
Durante el curso se forjan amistades con profesores, compañeros, monitores, familias anfitrionas y locales que se convierten en parte de una gran aventura compartida. Con cada conversación, cada actividad y cada rincón que exploramos, aprendimos algo nuevo sobre sus costumbres, tradiciones, estilo de vida y, sobre todo, nos atrevimos a hablar en inglés más que nunca.
Irlanda tiene una magia especial que despierta en cualquiera las ganas de seguir emprendiendo aventuras como esta. Cada día es una oportunidad para crecer como persona, salir de la zona de confort y descubrir la belleza de la diversidad cultural. Sin lugar a dudas, esta experiencia va más allá de aprender un idioma; se trata de abrir la mente a un mundo lleno de oportunidades.
¡¡¡ Han sido 2 semanas increibles!!!
He conocido a un montón de gente, tanto española como inglesa, y he aprendido a ser más extrovertida e independiente.
Todos los días hacíamos actividades divertidas y creativas, que nos ayudaban a conocer mejor a nuestros compañeros y a mejorar nuestro nivel de inglés.
La ciudad, encantadora, moderna y a la última, con establecimientos comerciales muy variados, edificios históricos, buenas comunicaciones… Además, visitamos lugares maravillosos, como la calzada del gigante, Donegal y los paisajes, únicos.
Los monitores siempre estuvieron a nuestro lado, ayudándonos y enseñándonos cosas sobre la ciudad y su gente, siendo siempre muy amables y cercanos.
En cuanto a mi familia en Derry, no he podido estar más contenta, siempre amables y considerados, han estado ahí en todo momento para lo que necesitase.
Ha sido una gran experiencia, he hecho muchos amigos, he conocido otra cultura y he mejorado mi inglés, en definitiva, ha sido un viaje inolvidable. Gracias Eurolingua.
Siempre que hablaba con mi familia sobre viajes, mi madre me recordaba el tiempo que pasó en Derry en el 98. Me contaba que pasó
unas semanas inolvidables y aprendió un montón, que le encantó la ciudad y estar inmersa en la cultura irlandesa y que sin duda necesitaba ir alguna vez en mi vida. Este año, gracias a la beca que me concedió Eurolingua, he podido hacer ese sueño realidad.
Después de montar en el avión y un largo viaje en bus desde Dublín, llegué a Derry. Allí, lo primero fue conocer a mi host mum, que desde el primer momento nos mostró que si en cualquier momento la necesitábamos, ella estaría allí para nosotros.
Después de un más que merecido descanso, al día siguiente empezaron las clases, en las que gracias a los maravillosos profesores que tuvimos aprendí una gran cantidad de vocabulario y practiqué mis habilidades con el inglés. Pero también hubo lugar para la diversión y el buen rollo que tuvimos durante todas las clases.
Ese primer día también tuvimos nuestra primera actividad. En general, las actividades servían para pasarlo bien entre compañeros, aunque también aprendimos bastante a través de ellas. Desde una ruta por los murales de la ciudad hasta un bingo musical, en todas pasamos un buen rato mientras practicamos nuestro inglés. También tuvimos actividades nocturnas, enfocadas principalmente al baile, en las que lo dimos todo intentando aprender danzas irlandesas y escocesas. Además, los sábados tuvimos la suerte de hacer pequeñas excursiones (una a Glenveagh Park y otra al Giants Causeway), en las que pudimos no sólo conocer Derry, sino también otras zonas de Irlanda, caracterizadas por su importancia natural y cultural.
Sin embargo, lo que más aprecié de esta experiencia fue la oportunidad de estar inmerso en la cultura irlandesa. Los paseos por la ciudad, escuchar el acento de la gente local, la cantidad de lugares históricos que pudimos visitar… El hecho de poder disfrutar de todo esto y mucho más es lo que de verdad aprecio de este viaje. Ahora ya desde casa, recuerdo estas dos semanas, que en algunos sentidos se sintieron como mucho más tiempo y en otros como mucho menos, y entiendo por completo la insistencia de mi madre por que viviera esta maravillosa experiencia. Además, también entiendo lo afortunado que he sido al poder pasar este tiempo en una ciudad como Derry, todo gracias a Eurolingua. Pero lo que mejor entiendo es que, en la vida, es necesario viajar, descubrir otros lugares y otra gente, por lo que animo a cualquiera a no pensárselo dos veces y aprovechar cualquier oportunidad que se le presente.
Recientemente, tuve la oportunidad de participar en un programa 100% becado en Dublín gracias a Eurolingua, que me concedió esta maravillosa oportunidad debido a mis excelentes medias en Administración y Dirección de Empresas y Derecho hasta el día de hoy.
Durante 2 semanas, asistí a clases diarias de inglés, en mi caso de nivel avanzado. Estas clases, de tres horas cada una, fueron una experiencia enriquecedora tanto a nivel académico como personal. Disfruté cada momento de las sesiones, donde no sólo mejoré mi
nivel de inglés, sino que también conocí a compañeros de diversas partes del mundo, creando vínculos preciosos que deseo perduren en el tiempo.
Además de las clases, el colegio dublinés organizó varias excursiones que nos permitieron explorar la ciudad y sus alrededores. Cada excursión fue una oportunidad para aprender más sobre la cultura irlandesa y su historia. Visitamos lugares emblemáticos como Temple Bar, Glendalough, y el pintoresco pueblo de Kilkenny. Estas salidas fueron tan emocionantes y educativas como las clases mismas, ya que nos permitieron aplicar lo aprendido en un contexto real.
Ya os habréis dado cuenta que me gusta mucho remarcar que el programa no solo fue una experiencia educativa, sino también un intercambio cultural. Conocí a personas maravillosas y pude aprender sobre sus culturas, lo que enriqueció aún más mi estancia en Dublín. La convivencia con estudiantes de diferentes nacionalidades me ayudó a ampliar mi perspectiva y a valorar la diversidad.
Estas dos semanas en Dublín fueron inolvidables. Agradezco profundamente a la agencia de becas por brindarme esta oportunidad única. La experiencia no solo mejoró mis habilidades lingüísticas, sino que también me permitió crecer a nivel personal y profesional. Sin duda, recomendaría este programa a otros estudiantes que buscan una experiencia educativa y cultural enriquecedora.
Hace ya varios días que volví de mi estancia en Derry y aún no me puedo creer todo lo que he vivido gracias a esta oportunidad que las becas Eurolingua me han ofrecido. Les estaré eternamente agradecida. Han sido dos semanas que he aprovechado al máximo y de las que estoy segura que recordaré toda la vida.
Todas las mañanas, íbamos al colegio y dábamos clases de inglés, pero de una forma muy distinta a la que estamos acostumbrados en España. Las clases estaban formadas por grupos pequeños, de entre 8 y 10 personas, y potenciaban la comunicación oral, por medio de numerosas actividades y juegos, que hacían que todos participáramos de forma activa en las clases. Además, los profesores
eran muy amables, siempre que no entendías algo tenían paciencia y te lo volvían a explicar, hasta que tuvieras claro lo que tenías que hacer.
Por las tardes, hacíamos actividades muy divertidas y amenas que nos permitían adentrarnos en la historia y la cultura de Irlanda. Aunque también tuvimos tiempo libre para otros planes con nuestros amigos en los que nos lo pasamos genial; como ir a la piscina, al cine, jugar a los bolos, ir a unas camas elásticas, hacer picnics en el parque… Además, también había días en los que teníamos fiestas por las noches y nos divertíamos un montón bailando, tanto bailes que ya conocíamos como otros bailes propios de allí que nos enseñaban.
Por otro lado, tengo que decir que la host-family ha sido súper amigable. Nos ayudaba en todo lo que le pedíamos, y tanto mi compañera como yo nos hemos sentido muy a gusto con ella.
Y por último, tengo que decir que estoy súper agradecida por toda la gente que he conocido y todas las amistades que he forjado, que son como una familia, y que estoy segura de que durarán para siempre.
¡Muchísimas gracias a Eurolingua por hacer posible la mejor experiencia de mi vida!
Derry girls forever ❤️
¿Cómo empiezo este artículo? Lo primero de todo quiero agradecerle de todo corazón a Eurolingua por haberme dado la oportunidad de vivir una experiencia lingüística maravillosa que se ha convertido en lo mejor que he hecho en mi vida, me llevo amigos para siempre y además he conseguido mejor mi nivel de inglés exponencialmente, cosa que sé que me dará un gran número de ventajas en el futuro tanto a nivel personal como laboral.
Estas dos semanas han sido algo inolvidable, el sistema de clases en inglés es una maravilla, ya que nos incentiva a aprender a la vez que a pasárnoslo bien y aprender a trabajar en grupo.
Las familias fueron increíbles, todos mis amigos y yo recibimos mucha atención y ayuda por parte de ellas y por eso todos tuvimos una experiencia muy agradable y adecuada. Personalmente hablando, mis hosts fueron maravillosos, haciéndome sentir incluido y comprendido desde el día 1. Siempre tuvieron muy en cuenta que era un estudiante español, y por ello entendían mis fallos y me ayudaban a mejorar, sólo puedo decirles “Thank you from the bottom of my heart for making this experience unforgettable”.
Ya solo para acabar quiero darle las gracias a todo el equipo de Eurolingua por vuestro gran trabajo y a la empresa en si por haberme regalado una experiencia de la que me llevo recuerdos y memorias para toda la vida.
Desde el primer contacto se demostró un impecable nivel de organización. El proceso de inscripción fue fluido, y recibí una guía útil sobre qué esperar durante mi estadía en Dublín. Todo esto ayudó mucho a que mi llegada a la ciudad transcurriera sin contratiempos.
Tuve la suerte de que mi alojamiento fuese una casa donde compartí con otros becados, lo que me ofreció desde el primer momento tener amigos con quien compartir la experiencia. Además, se encontraba en una zona muy céntrica a apenas 20 minutos de casi todo y con muy buena conexión en las líneas de buses.
Las clases de inglés fueron excepcionales. La escuela ofreció lecciones muy dinámicas donde se le daba mucho peso a la expresión oral. Los objetivos de la semana estaban muy bien estructurados y los profesores se ajustaron siempre para lograr que los aprendiésemos. Las clases intensivas eran en pequeños grupos, facilitando el aprendizaje.
Las tardes reservadas para actividades culturales complementaban nuestro aprendizaje. Estas actividades no solo mejoraron mis habilidades lingüísticas, sino que también me permitieron conocer más sobre la cultura irlandesa.
El mayor desafío fue adaptarme al acento irlandés, que inicialmente resultó difícil de entender. Sin embargo, a lo largo de las dos semanas se me fue facilitando el entendimiento. El principal beneficio de este programa fue la mejora significativa en mi fluidez y confianza al hablar inglés. Las oportunidades constantes de practicar en situaciones reales, tanto en clases como en la vida cotidiana,
aceleraron mi aprendizaje.
Recomiendo el programa de inmersión lingüística de Eurolingua en Dublín. La combinación de enseñanza de alta calidad, actividades culturales bien planificadas y una acogedora experiencia de hospedaje hizo que estas dos semanas fueran extremadamente provechosas. Si estás buscando una forma efectiva y envolvente de mejorar tus habilidades lingüísticas mientras disfrutas de una nueva cultura, este programa es una excelente elección.